Las calles de la aldea
Son aún más tristes
Que el fin del mundo
La buena arquitectura
Tiene algo de poesía
La buena poesía
Tiene algo de amor
El amor tiene algo de locura
Todas las noches
Mientras intento el poema
Me duermo nombrándote
Eres una musa exigente
Está dicho todo, lo sé
Pero como nadie escucha
Hay que decirlo de nuevo
Afuera llueve torrencialmente
Y sopla un viento gélido
Espero que tengas abrigo
Espero que te cuides mucho
Porque el mundo es peligroso
Para las criaturas inermes
Abandonadas a su suerte
Oh qué suerte la soledad
La suerte de las almas buenas
Perdidas en el ostracismo
¿O no tenemos nada que perder?
La muerte como el amor
Son misterios gracejos
Aunque sean más tristes
Que las calles de la aldea.
Son aún más tristes
Que el fin del mundo
La buena arquitectura
Tiene algo de poesía
La buena poesía
Tiene algo de amor
El amor tiene algo de locura
Todas las noches
Mientras intento el poema
Me duermo nombrándote
Eres una musa exigente
Está dicho todo, lo sé
Pero como nadie escucha
Hay que decirlo de nuevo
Afuera llueve torrencialmente
Y sopla un viento gélido
Espero que tengas abrigo
Espero que te cuides mucho
Porque el mundo es peligroso
Para las criaturas inermes
Abandonadas a su suerte
Oh qué suerte la soledad
La suerte de las almas buenas
Perdidas en el ostracismo
¿O no tenemos nada que perder?
La muerte como el amor
Son misterios gracejos
Aunque sean más tristes
Que las calles de la aldea.
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