viernes, 6 de junio de 2025

Las musas que me soltaron la mano



Me soltó la mano
Con pena pero sin piedad
La sigo amando gratuitamente 
Sé que no volverá nunca más 
No espero nada de ella
Excepto indiferencia 
Me alcanza con haberla conocido 
Y haberme enamorado
A primera o segunda vista 
Y no tiene por qué ser recíproco 
No saber amar 
Es harto peor
Que no ser amado 
Una mujer nunca se arrepiente
De abandonar a un hombre 
Porque suele tener un harén 
Siempre a disposición 
El mercado capitalista 
No demanda poesía 
Sino mercancía 
El poeta escribe
Para que los mercaderes 
Lucren con su trabajo
Ellos ganarán dinero 
Y favores mujeriles
Todo lo que le fue negado
Al poeta inerme 
Al que las musas
Le soltaron la mano
Ustedes se preguntarán 
Qué se gana con la poesía 
No se gana nada
Sino que se pierde
No es rico quien más tiene 
Sino quien más puede prescindir.

No hay comentarios: