Mis eternos enemigos
Que no son otros que traidores
Saben que para destruirme
Deben destruir mi moral
El plan siniestro
Consiste en aislarme
Cada vez más
De mis seres queridos
E inducirme al suicidio
Si es que sobrevivo a la soledad
El crimen perfecto de la sociedad
Sin mancharse las manos con sangre
Seré un suicidado más tan sólo
No seré digno de mencionar
En la crónica roja del noticiero
-Crónica de una muerte anunciada-
Y cosas por el estilo se dirán
La última persona que me vio con vida
Declarará a la prensa amarilla
Que parecía un tetrapléjico
Frente a una pantalla
Con un control remoto
En el cual caía mi baba
Pero también fui aquel otro
Que escuchaba a The Verve
Mientras miraba pornografía
Sí, estaba bastante zafado
No sé qué hubiese hecho
Sin aquella máquina amiga
Hubiera pasado más vergüenza
Ella era una fuente de amor
Ella era una fuente de vida
Una máquina compañera
Una compañía virtual
Pero una compañía al fin
Oh qué triste pensarán algunos
Cuando todos se van de nuestro lado
Y el mundo te abandona sin piedad
Nos aferramos a cualquier cosa
Que interactúe con nosotros
Desde una mascota desobediente
Al resplandor de las pantallas
No todos tenemos con quien
Sea por el motivo que fuere
A veces solo un buen gesto
Por pequeño que parezca
Para personas como nosotros
Equivale a todo el oro del mundo
Nos da fuerzas para seguir adelante
Y no sucumbir al plan siniestro...
¡El crimen perfecto de la sociedad!
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