Ofenden mi inteligencia
Y yo les ofendo su idiotez
Las mujercitas con suerte
Me abandonan de una vez
Pero las muy jodidas
Me hacen la vida imposible
Brujas que ríen como brujas
Mientras maldicen mi nombre
Y preparan pócimas macabras
Lanzan hechizos como encantos
Misteriosos e irresistibles al oído
Y a los ojos necios e inocentes
Ellas no son más que pendeviejas
Pervertidas por los hombres
Alguna vez amaron al Señor
Pero después de tantas penas
Se dejaron seducir por el diablo
La superstición siempre paga
La verdad tiene que mendigar
No saben amar con el alma
Sino con el cuerpo decrépito
Y quieren venganza por eso
Las brujas que ríen como brujas
Y ofenden mi inteligencia.
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